Motoi Yamamoto empezó a crear estas instalaciones cuando su hermana falleció de cancer cerebral a los 24 años en 1994.
Como un diario empezó a dibujar líneas que le llevan a explorar el dolor y la incertudumbre.
Sus recuerdos parecen cambiar o desaparecer con el tiempo, pero en sus instalaciones busca un momento efímero para sumergirse en sus recuerdos.
Usa la sal como elemento de su trabajo porque esta está presente en todos los aspectos de la vida humana, pero también de la muerte.
Reconoce la muerte a través de esta obra y trata de determinar la distancia entre sus recuerdos y él mismo.
link: Motoi Yamamoto
tiene su punto!!
ResponderEliminarHola Nacho!, pues si, pero una pena que no dure.
ResponderEliminareso es lo que quizas, mas me guste, lo efimero y lo vital!
ResponderEliminarsaludos
¡Coño! ¡Espectacular!
ResponderEliminarSi que lo es. Y soy fan de sus jardines zen gigantes, para desestresar lo mejor!
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